Partícipes y hostiles
Los temas de las obras son tomados con la sencillez y confianza que se siente, cuando son testamentario de nuestros seguidores antepasados, los personajes que son directamente autóctonos a nuestras vivencias de alegrías, tristezas, triunfos y falta de fe en un diario transcurrir, labores dignas y mágicas tejidas por nativos artesanos, recolectores de café, bodegones selváticos, interiores llenos de luz de color violeta, caballos de polo que al galope se descongelan o abstractos en derretimiento, todos movidos por la luz de los velos. Un caso especial son los girasoles su función desde el amanecer hasta el anochecer es vigilar incansablemente en la eternidad al sol en su calentamiento , pasajes religiosos con visión del hielismo, oraciones de auto-retratos semidesnudos en suplica de nuestros temores y necesidades, la salud, libertad, amor, paz, trabajo y perdón, abstractos con montañas y lagos custodiados por piedras de color agua, también diseños de trajes fríos tejidos en finos hilos con la escarcha de bancos de niebla y en complicidad de las arañas de los frailejones en lejanos paramos.
La bisutería entre otras artesanías elaboradas en materiales naturales exóticos. Estos elementos participes permanentes de las labores cotidianas y nocturnas siempre acompañados de chiala foco celestial lunático siendo un esférico bloque de hielo brillante y translucido que en estaciones es hechizada temporalmente por su enemigo el sol y poco mas o menos se deja derretir y languidece viéndosele dos picos como guijarros de hielo, su fin es ser aliada confidente de amores indios de artistas.
Los enemigos del hielismo son creados por su propia naturaleza hostil, de origen volcánico y solar presencia enigmática aliados del fuego y calor con sentido figurado de mundos bajos, incompatible y disonante ante la presencia de este pues teme ser derretido por él, matando y destruyendo su naturaleza y vida derritiendo sus continentes de hielo, este será de generación en generación su invitado ausente con su símbolo color rojo alejado en cada obra pintada, del cual solo una advertencia transmitida por un pariente cacique indígena mantendremos en nuestras manos como símbolo universal, una señal de humo en una vela apagada, recordatorio para futuros hielistas, de algo que solo iba a suceder. Un calentamiento global.
(Artistas devotos al hielismo, sus velos sutiles y transparentes los protegerán en todas las épocas y corrientes artísticas de libre albedrío los hielos en su momento los manipularan fuertes, rígidos y fríos como escarcha o bruma de los bancos de niebla, que ellos como fenómeno regresaran a su propia naturaleza; sus enemigos vetustos son amigos de ese color indigno, máscaras de desenfrenos en un mundo inmerecido; guárdenlos en una chuspa de papel reciclado y amárrenlos con fique y luego congélenlos para toda la eternidad, en un santiamén).